La evaluación formativa constituye hoy una de las herramientas más potentes para mejorar los aprendizajes y acompañar el desarrollo integral de las y los estudiantes. A diferencia de la evaluación sumativa, que mide logros al final de un proceso, la evaluación formativa se integra de manera cotidiana en el aula y ofrece información constante sobre el avance de cada estudiante. Esto permite a los equipos docentes ajustar sus estrategias pedagógicas en el momento oportuno, promoviendo una enseñanza más flexible, pertinente y centrada en las necesidades reales del alumnado.
Al situar el foco en los procesos y no solo en los resultados, esta práctica favorece una comprensión más profunda de las fortalezas y dificultades de las y los estudiantes. De este modo, se transforma en un recurso clave para orientar la toma de decisiones pedagógicas, fortalecer la retroalimentación y construir entornos educativos que valoran la diversidad y los ritmos de aprendizaje.
En Chile, las instituciones del Sistema de Aseguramiento de la Calidad (SAC) han desarrollado una serie de recursos y actividades que buscan apoyar a docentes y equipos directivos en la implementación de la evaluación formativa. Estos materiales ofrecen orientaciones prácticas, ejemplos concretos y estrategias adaptadas al currículo nacional, con el fin de promover procesos evaluativos más significativos y contextualizados.
Si quieres conocer más y acceder a herramientas que pueden enriquecer tu práctica docente, te invitamos a visitar los siguientes recursos:
Compilado de recursos de las instituciones del SAC para docentes y equipos directivos: Evaluación Formativa
Actividades de evaluación formativa: Actividades Evaluativas Formativas | Currículum Nacional